Yihaaaa!. Fue duro pero merecio la pena.
Ya estamos de vuelta en Cusco despues de 3 dias muy muy intensos. Me cago en to. Despues del camino de santiago donde hicimos 350 kms en dos semanas pensaba que hacer 45 en 3 dias seria pan comido. Solo que esta vez 40 de esos 45 son cuestas que dejan al Mortirolo en verguenza. Es que habia tramos que eran de 70 grados (no estoy exagerando) y en los que necesitabas las manos para no caerte. Muy duro, pero como se puede apreciar en la foto de ahi arriba todo merecio la pena. Machu Picchu es simplemente increible, una obra de arte. Una ciudad historica en un escenario insuperable.
La caminata empezo para nosotros un dia tarde, debido al mal cuerpo de lynz, y esta circunstancia se probo fatal, ya que el primer dia hicimos lo que otros en dos para poder contactar con el grupo que habia salido un dia antes. El viernes dia 12 de enero de 2007 no se me olvidara facilmente. Despues de una cena habitual el jueves en la aldea Yanapai nos volvimos al hotel a hacer la maleta y preparar el viaje. Pudimos dormir una hora y nos despertamos a las 2 de la mañana para salir en taxi a las 2:30. Teniamos que llegar al km82, comienzo del camino inca, a las 5 para poder llegar al primer campo a las 7 que es donde estaba el grupo, en el km88. El trayecto en taxi para olvidar, fueron mas de dos horas de infierno. Llovio como nunca habia visto antes y el carro no estaba preparado para negociar ese tipo de curvas en esas circunstancias. El vehiculo hacia tantos ruidos que a pesar de estar tremendamente cansados nos fue imposible dormir. El caso es que cuando amanecio desaparecieron las nubes y la caminata de 6kms hasta el campo no fue malo. Llegamos a tiempo para poder desayunar con el resto de la gente, solo que ellos se acababan de despertar y nosotros llevavamos muchas horas sin descansar (una hora de sueño no es nada). Asi que de esta manera nos enfrentabamos a la etapa mas dura del camino, casi sin dormir y con 6kms mas a la espalda, y por si fuera poco Lynz no habia comido casi nada el dia anterior por culpa de su estomago. Delante de nosotros un puerto a 4200 metros de altura. El primer campo, Quoriwayrachina, en el km 88, esta a 2400 metros. Como se dice en ingles, Do the math!. Los primeros 5 kms no fueron muy duros. Visitamos unas ruinas chulas, Llactapata, y todo parecia ir bien. Poco despues empezaria el infierno. Se que muchos pensaran que soy un exagerado, pero me gustaria que lo probasen ellos mismos. Para no entretenerme con detalles yo doy estatisticas: 15 kms y 6 horas mas tarde no habia alma humana en la punta de Wanniwañusca que pudiese pronunciar palabra. Tenemos una foto que pasara a la historia y que publicare en otra ocasion.
Lo gracioso es que no acampamos ahi, sino que seguimos 2 horas mas hacia abajo para llegar al campo Paqaymayu. Y esas dos horas no fueron nada faciles tampoco. Los mismos grados de inclinacion para subir los habia para bajar y eso es mortal para las rodillas. El caso es que llegamos sobre las 6 de la tarde al campo tras mas de 15 horas de viaje, 2 en taxi, 7 de caminata en ligero ascenso y otras 6 de subida de escaleras. Contando descansos y comidas claro esta. Estabamos tan exhaustos que ni cenamos y fuimos a dormir a eso de las 8 de la noche.
Cuando pensabamos que ya habian acabado las desgracias por el dia no contamos con Ilapa, el dios inca de la lluvia y el rayo, que decidio tocar un poco los cojones al personal y no paro quieto durante toda la noche. La consecuencia fue que todas las tiendas menos una (no la nuestra) se empaparon y nos despertamos con mucha de la ropa mojada. No pudimos descansar todo lo que quisimos o debimos.
El dia dos (etapa 3) fue durillo tambien, teniendo que subir el puerto de Runcuracay entre otros, pero despues del dia anterior nada nos podia parar. Visitamos las ruinas de Sayaqmarca. La noche la pasamos en el campo de Wiñaywayna, que fue el primer contacto con la civilizacion. Un restaurante y duchas nos esperaban ahi. Al llegar al campo malas noticias, la zona donde debiamos acampar de habia derrumbado por completo el dia anterior por culpa de Ilapa, asi que o dormiamos en el mismo restaurante o pagabamos 25 soles por una cama en el diminuto albergue. Nosotros, para mas inri, contabamos con una desventaja sobre los demas caminantes porque la agencia se habia olvidado de proveernos de esterillas asi que despues de negociar un poquito conseguimos dos camas por 20 soles cada una. Me dormi en 0,2 segundos, solo que me parecio que la alarma sono otros 0,2 segundos despues de dormirme en vez de las 5 horas que decia el reloj que habian pasado.
La mañana del dia 14 y ultimo del camino fue caotica. Todos los grupos (500 personas) pasan la noche en Wiñaywayna y el ultimo dia se convierte en una carrera para ver quien puede ver Machu Picchu el primero. Nuestro grupo fue el segundo en llegar a la puerta del Sol, lugar donde se ven por primera vez las ruinas, y por tanto encontramos sitios de lujo para admirar la salida del sol sobre Machu Picchu.
500 fotos despues aqui me encuentro, en el cyber de siempre de Cusco, tratando de explicar brevemente nuestra experiencia, pero me resulta imposible resumir 3 dias tan intensos en unas pocas palabras. Por otro lado me muero de hambre por lo que dejare los detalles para luego.
Mañana nos vamos a Puno por la mañana. 12 dias en Cusco han dado para mucho, pero ya toca ver cosas nuevas.
Un abrazo
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